El mayor del Ejército Raúl Alejandro Girón empezó este jueves su defensa material en el juicio de fondo a los militares y policías acusados en Operación Coral, en la que inculpó nuevamente a los generales que encabezan el extenso expediente de corrupción.
Dijo que el mayor general Adán Cáceres, exjefe del Cusep; el subjefe de esa institución, Julio Camilo De los Santos Viola; el director del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur), Juan Catlos Torres Robiou, y el coronel de la Policía Nacional, Rafael Núñez de Aza (quien fungía como gerente financiero a la vez en el Cestur), incurrían en gastos exorbitantes, comprando propiedades y vehículos de lujo con dinero de las dos instituciones.
Los recursos eran sustraídos con nombramientos de policías y militares en la institución que no rendían labor y que devolvían la mayoría del salario a la supuesta red.
También con la venta de especialismo y de ascensos, por los que se cobraban cientos de miles de pesos a un solo beneficiado, afirmó el oficial y exencargado de nómina en Politur, hoy Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur).
Citó, por ejemplo, que la presión que le «metían» el general De los Santos Viola y Guillermo Torres Robiou, también acusado, lo tenía intranquilo, porque a «diario iban a buscar dinero«.
Advertencia a los acusados
Sobre el especialismo, reveló que el entonces director de la Policía Nacional, Ney Adrian Bautista, advirtió a los acusados que su venta lo tenían «harto ya».
«Yo no estoy aquí para afectar a nadie, estoy haciendo mi defensa material y demostrando que la personas que se paran aquí (tribunal) para decir que no tienen que ver en esto, son precisamente las que tienen que ver», se defendió Girón.
El juicio de fondo es conocido por el Primer Tribunal Colegiado los martes y jueves.
El Ministerio Público acusa a casi treinta militares y policías de estafar al Estado con más de 4,500 millones desde el Cestur y el Cusep.
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