“Y la verdad os hará libres y confiamos en la palabra de Dios”, expresó Kenia Pérez, esposa del profesor Fernando Altagracia Peña, acusado de violar a una estudiante de 13 años en el municipio Quisqueya, San Pedro de Macorís.
Familiares, amigos de la comunidad y allegados se dieron cita en las afueras del Palacio de Justicia de San Pedro de Macorís para pedir «justicia» a favor del docente.
“Dios le da sus peores batallas a sus mejores guerreros”, “Libertad para Fernando”, “La comunidad está contigo”, son algunos de los enunciados escritos en las múltiples pancartas que levantan los comunitarios para pedir su libertad.
Luisa Eusebio Vásquez, madre del implicado, aseguró que su hijo es inocente y que “desde los ocho años está en el camino (de Dios) y lo he criado sola», ya que su esposo murió cuando él era un niño.
En paralelo, la esposa del docente para quien el Ministerio Público pide prisión preventiva como medida de coerción, defendió que el arresto de su cónyugue es una «injusticia» y que él es una persona «respetuosa, llena de valores y principios, un hombre intachable».
“Es totalmente una injusticia, sabemos que cuando una persona es digna de admirar, una persona de trabajo, una persona íntegra de familia… siempre estamos rodeados de personas que quieren hacernos daños e involucrarnos en hechos al cual no se ha cometido», expresó Pérez.
En el banquillo de los acusados
Este lunes fue aplazada la audiencia de conocimiento de medida de coerción en contra de Fernando Altagracia Peña, quien impartía docencia en la escuela básica La Siria, del municipio Quisqueya, en la provincia San Pedro de Macorís.
El motivo del aplazamiento fue la ausencia de la menor presuntamente abusada y que la defensa técnica «no estaba preparada» para subir a estrado.
Por este caso está prófugo otro profesor del plantel educativo, a quien también se le atribuye participación en los hechos.
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